Las nuevas estimaciones de la vendimia realizadas en las dos últimas semanas por representantes del sector vitivinícola apuntan a una cosecha superior a los 46 millones de hectolitros. Cooperativas Agroalimentarias ha revisado al alza los datos ofrecidos en julio y anticipa ahora un aumento del 25% en Castilla-La Mancha, lo que significaría pasar de 19,4 a 24,2 millones de hectolitros. Por su parte, el bodeguero Félix Solís ha declarado que el incremento de la producción final oscilará entre el 28% y el 30%, “si no es que se superan esos porcentajes”, una expectativa que implicaría rebasar los 25 millones de hectolitros solo en Castilla-La Mancha.
Dado que la comunidad autónoma tiene un peso porcentual sobre el total ligeramente superior al 50%, la producción global para el conjunto del país oscilaría entre los 46 y los 50 millones de hectolitros. En cuanto a la Unión Europea, se prevé que se alcancen cifras cercanas a los 170 millones de hectolitros, mientras que la vendimia en el hemisferio sur ha arrojado resultados “ligeramente superiores a los del pasado año”.
Cooperativas Agroalimentarias constató el pasado 21 de septiembre, durante el encuentro mantenido en Alcázar de San Juan (Ciudad Real) con las principales bodegas cooperativas de la región, que la producción en la presente campaña aumentará previsiblemente en torno al 25%, porcentaje superior a los datos adelantados en la pasada Asamblea de Vendimia celebrada en el mes de julio por la organización.
El portavoz sectorial vitivinícola de Cooperativas, Juan Fuente, afirmó que las variedades internacionales, “las más tempranas, generalmente en espaldera, y mejor dotadas en cuanto al aporte hídrico, respecto a las tradicionales (airén, bobal, etc.), han superado las expectativas iniciales, tanto en calidad como en cantidad”.
Por su parte, el presidente y consejero delegado de Félix Solís Avantis, Félix Solís Yánez, ha pronosticado una vendimia “bastante complicada” en Castilla-La Mancha, y ha anticipado que el aumento de la producción será, al menos, del 28% al 30%, lo que dispararía la producción castellanomanchega por encima de los 25 millones de hectolitros.
Existencias de campaña y mostos concentrados
Respecto a las existencias de campaña, el portavoz sectorial de Cooperativas Agroalimentarias indicó, asimismo, que son muy inferiores a las de 2017, exactamente 3,33 millones de hectolitros menos de vino y mosto en España y 1,72 millones menos de hectolitros en Castilla-La Mancha. Igualmente, se refirió a que la maduración tardía registrada en las variedades tradicionales de la comunidad autónoma ha provocado, en sus primeras recogidas, una graduación alcohólica media natural menor de lo normal, por lo que la organización ha solicitado a la Consejería de Agricultura autorización para añadir mostos concentrados rectificados con el fin de aumentar hasta 1,5% el grado alcohólico de sus vinos, una medida que ya fue aprobada el pasada 26 de septiembre en la Comunidad Valenciana y que está permitida por la reglamentación comunitaria, siempre que no se supere un determinado grado alcohólico. No obstante, la Unión Extremadura ha solicitado a la Administración que no autorice una medida que, a su juicio, “solo beneficia a algunos industriales y a los productores de viñedos de riegos intensivos y producciones de 60.000 kilos por hectárea”.
Importancia de diversificar la oferta
En medio de este contexto, que se ha visto agravado por la caída de los precios de la uva registrada en Castilla-La Mancha como consecuencia directa del aumento de la producción, Juan Fuente ha hecho hincapié en la importancia de diversificar la oferta de los transformados vitivinícolas y, en este sentido, ha instado a incentivar, más que nunca, la elaboración de mosto (entre el 20-25% de la producción total) y a abastecer el mercado tradicional de alcoholes y vinagres, con al menos el 10% de la producción vinícola. De ese modo, en su opinión, “se logrará mayor calidad y más valor en los vinos” que se elaboren en Castilla-La Mancha durante esta campaña.